El azúcar en sí no es malo, el problema es que si no consumes la dosis adecuada puede llegar a ser un gran enemigo. La clave se encuentra en la frecuencia y cantidad que tomes. Por ejemplo, los habitantes del siglo XVIII consumían 4 kilos por año hoy nosotros consumimos unos aterradores 70 kilos. Diabetes, enfermedades cardiacas, cáncer, problemas lípidos, accidentes cerebrovasculares todas estas enfermedades son guiadas por el consumo excesivo de azúcar y demuestran el efecto directo que tiene en nuestro organismo el descontrol alimentario en el que vivimos. “Todo es veneno, nada es veneno. Solo la dosis hace el veneno” – Paracelso. Lo peor del azúcar es que nos perjudica poco a poco sin darnos cuenta, pero sus efectos cuando llegan son devastadores. Muchos pensarán que a los deportistas no nos pasa factura la ingesta indebida de azúcar, ya que, la palabra obesidad siempre está relacionada con la…